Gracias a la colaboración Mucha Foundation y CaixaForum Madrid, por primera vez podremos ver expuestas 200 obras de Alphonse Mucha en España. A través de carteles, joyas, pinturas, fotos, libros u objetos diversos, podremos apreciar el trabajo de un artista polifacético que ponía su trabajo en función del marketing sin complejos, incluso puso su nombre en un lujoso jabón que se comercializó en Estados Unidos.
Pintor y artista decorativo checo (Moravia, 1860- Praga, 1939), es ampliamente reconocido por ser uno de los máximos exponentes del “art nouveau” y su estilo lo plasmó en diferentes facetas artísticas/comerciales.
Consiguió su primer gran éxito como diseñador gráfico en 1894, con el cartel de la obra de teatro Gismonda, de Victorien Sardou, para la compañía de Sarah Bernhardt. A partir de elementos del arte bizantino y oriental, combinados con antiguas tradiciones centroeuropeas, Mucha creó un estilo decorativo que se caracteriza por una exuberante elegancia y una sofisticada languidez. El éxito fue inmediato. Contratado por Sarah Bernhardt para realizar los carteles de sus obras de teatro, vivió en París el esplendor del art nouveau y fue uno de sus representantes más populares. La influencia de su obra gráfica se dejó sentir en todo el mundo, y las joyas que proyectó para el orfebre Fouquet se convirtieron en piezas de colección.Mucha fue también un pintor reconocido.
En 1904 emprendió la aventura americana y viajó a Nueva York, donde realizó numerosos retratos. Cuatro años más tarde regresó a Praga y puso su arte al servicio de la creación de una mitología eslava, fundamento simbólico del nuevo Estado checoslovaco. Mucha fue iniciado en la Gran Logia Masónica de París en 1898, y alcanzó el grado supremo de gran maestro de la Logia de Checoslovaquia. Nunca concibió su obra desde la frivolidad, sino desde un espíritu de servicio visionario.
El comisario de la exposición Álex Mitrani explica la organización de esta exposición en ocho ámbitos de recorrido conceptual “Es un planteamiento diferente en el que nos hemos alejado de discursos convencionales cronológicos o técnicos”.En el primero de los espacios podremos ver las obras que Mucha creó para el mundo del teatro como decorador, diseñador de vestuarios y autor de carteles.Un segundo ámbito está ocupado por obras que se inspiran en las ciudades, en especial las relacionadas con la Exposición Universal de París de 1900, que supuso la consolidación del “art nouveau”. A continuación vemos un espacio dedicado a “Belleza. La mujer como musa e icono”.
También podremos encontrar espacio dedicado a las fotografías realizadas por Mucha a modelos, familia o amigos -como Gauguin- a su interés por las ciencias ocultas, los estudios para el proyecto “la epopeya eslava”, la modernidad en la publicidad o un espacio en el que se muestra la influencia de su estilo.
En 1898, Mucha vino a Barcelona para realizar unos carteles que anunciaban los chocolates Amatller y Petróleos Gal, lo que contribuyó a que los barceloneses conocieran, del considerado “padre del art nouveau”, el modernismo. De hecho la influencia de este autor en Cataluña es patente y puede verse en obras –también en la exposición- de Lambert Escales, Lluís Labarta, Alexandre de Riquer y Eulogio Varela.Alphonse Mucha, fue pionero en la aplicación del arte a la publicidad y al diseño gráfico, en el uso de la reprografía y las técnicas gráficas más audaces, en la utilización de la fotografía, así como en convertir a la mujer en el elemento protagonista de su trabajo y de la comercialización de cualquier producto, ¿les suena?
En diferentes aplicaciones triunfó en todo el mundo con estética y diseños que hoy están en la memoria plástica universal, aunque pocos sean capaces de pronunciar su nombre correctamente –Mujha-.
Las obras estarán expuestas en CaixaForum Madrid hasta el 31 de agosto y luego viajarán a Barcelona, Palma, Salamanca y Tarragona. Una buena oportunidad para conocer a uno de los padres de lo que hoy es el diseño gráfico.